domingo, 9 de septiembre de 2007

Deja que te vea, que otras primaveras. . .

Hablando y recordando contigo, viejas verdades, viejas historias que se fueron en ésta frenética búsqueda por encontrarnos. Ya se me olvido el día en que nos perdimos, y no creo recordar el día en que nos volvimos a mirar. El tiempo se acaba, o al menos eso me dicen todos. La seguridad de mis actos se esfuma con el pasar de las horas y con tu cara de olvido que me vuelve a la realidad, esa que me dice que no hay nada por delante de nosotros dos. El olor a las resignaciones me hace llorar a gritos; el olor a tu ausencia definitiva, no me consuela, me hunde, me mata. Simplemente ilusiones al otro lado del vidrio, veo mi rostro, feliz, esperándote al otro lado, invitándote a creer en ti, a creer en mí. El cielo se nubla en septiembre. La verdad se esconde dentro de libros que no han de abrirse, el silencio corta nuestras vidas que unidas no fueron capaz de desunirse. Te quiero, cuídate y que te vaya bien.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Miiish!
Y llegué por aquí de la nada!

:)

Me gustó su recinto caballero, jaja.. Un besote Lesin, "le adoro" [nótece]!

(K) mua.-


[[moma]]

Anónimo dijo...

" Fritz Perls: resolviendo aquellas que están inconclusas y que corresponden al pasado, y resolviendo las gestalten que van emergiendo en el momento inmediato, abriendo otras nuevas formas que se convertirán en figura de nuestras necesidades, y que a su vez serán enfrentadas y confrontadas para lograr su resolución o cierre. Este proceso existencial es interminable: la vida consiste en abrir y cerrar sucesivamente Ciclos de Existencia."